Meditación Orgásmica. Todo lo que debes de saber
Meditación orgásmica: placer y mindfulness en perfecta sintonía
La meditación orgásmica, o simplemente OM (por “Orgasmic Meditation”), es una práctica que mezcla el poder del mindfulness con el placer físico. ¿Cómo funciona? Imagina dedicar 15 minutos a frotar el clítoris con un patrón específico, pero sin la presión de llegar al clímax. Sí, aquí no se trata del destino, sino del viaje.
El verdadero objetivo de OM es estar presente, soltar el control y dejar que las sensaciones te guíen. Esta práctica conecta la mente con el cuerpo y permite una relación más profunda contigo mismx y con quienes compartas el momento. Quienes la practican aseguran sentirse más felices, relajadxs, con menos estrés y ansiedad, ¡y además disfrutan de relaciones más auténticas y conectadas!
¿Por qué practicar OM?
La meditación no solo calma la mente hiperactiva, también es un regalo para el cuerpo. Puede mejorar la circulación, aliviar tensiones musculares, potenciar la libido y, por si fuera poco, ayudarte a disfrutar más de tus experiencias sensoriales. Al conectar con tus sensaciones y enfocarte en el presente, las experiencias íntimas se vuelven más ricas y satisfactorias.
En la meditación orgásmica no importa si llegas o no al clímax. Aquí todo se trata de escuchar al cuerpo, dejarte llevar y disfrutar de esas sensaciones extendidas que surgen en el momento. Es una experiencia que se suele practicar en pareja, pero no te preocupes: ¡te compartimos una guía para la masturbación meditativa si quieres disfrutarla en solitario!
Cómo practicar meditación orgásmica paso a paso:
- Encuentra el lugar perfecto: Busca un espacio tranquilo, sin interrupciones ni distracciones, donde ambxs puedan relajarse por completo.
- Prepara tus herramientas: Ten a mano una toalla, lubricante y un cronómetro o reloj.
- Crea una posición cómoda: La persona receptora puede recostarse boca arriba con las piernas en forma de mariposa. Añade almohadas para mayor confort.
- Configura el tiempo: Programa el cronómetro para 15 minutos, con una alarma a los 13 minutos.
- Comienza la estimulación: Usa suficiente lubricante. La pareja coloca una mano debajo del trasero y el pulgar ligeramente dentro de la vagina, mientras la otra mano levanta suavemente el capuchón del clítoris. Acaricia el cuadrante superior izquierdo con movimientos rítmicos hacia arriba y hacia abajo, ajustando la presión.
- Cambia el ritmo al final: Cuando suene la alarma a los 13 minutos, realiza caricias hacia abajo durante los últimos 2 minutos.
- Cierre tranquilo: Al final, aplica presión suave en la vulva hasta que la persona receptora se sienta completamente de vuelta.
- Limpieza: Usa la toalla para retirar el lubricante.
Tips para disfrutar al máximo:
La confianza y la comunicación son clave para que esta experiencia íntima sea lo más placentera posible. Aprovechen el tiempo medido para relajarse y concentrarse únicamente en las sensaciones. Deja fuera cualquier estrés o distracción y permite que todos tus sentidos estén abiertos al momento.
Aunque OM tradicionalmente se enfoca en la estimulación manual, ¡la creatividad es bienvenida! Una vez que dominen la práctica, pueden incorporar juguetes, estimulación oral o incluso variaciones más intensas, siempre manteniendo el enfoque en estar presentes y disfrutar, sin la presión de alcanzar el orgasmo.
Recuerda: OM es mindfulness y placer en su máxima expresión. El objetivo no es llegar a un clímax, sino explorar, sentir y vivir el momento. Así que relájate, conecta y deja que el placer sea tu guía.